domingo, 19 de noviembre de 2006

DALÍ Y LOS MISERABLES - por PEPA DÍAZ


Decía Salvador Dalí que “gracias a la fotografía está resucitando el arte”. Claro, que también se aseguraba a él mismo que “Dalí no distingue el límite entre el drama de la realidad y el humor”, esencia pura del surrealismo. Como homenaje al genio se reflejan aquí algunas reflexiones aprovechando su técnica crítico paranoica.

La era digital supone a la imagen lo que Dalí a la pintura, una ruptura radical con las tradicionales técnicas pudiendo fusionar la pintura, el relieve y la escultura, a través del molde de una imagen real. Ha llegado el ultraísmo fotográfico y audiovisual, es decir, la urgencia de una renovación radical del espíritu y de la técnica de la imagen y el sonido: la era de la fusión, del intercambio, del desarrollo del fluido de conciencia, el cosmopolitismo de técnicas e imágenes.


La influencia de la pintura en la fotografía ya se perpetúa durante el siglo XX, hasta obtener semejanzas de cuadros con imágenes de noticias reales. Así, el fotoperiodismo, a veces consciente otras inconscientemente, capta, a través de los ojos de algunos fotógrafos, el mismo horror en una imagen que el que consiguieron pintores como Goya en la indescifrable mirada del pueblo ante los fusilamientos del 2 de Mayo. Las imágenes captadas en guerras o en desastres naturales como el niño que perdió a su padre en el terremoto de Irán de Eric Grigorian, galardonado con el WorldPress-Photo en 2003 o “La niña de Basora”, que recorre en esencia “Al Comeniños” de Los Disparates de goyescos. El dolor y la angustia de cualquier retrato de “Trabajadores” de Sebastiao Salgado o los paisajes desolados de Cristina Spengler..., las ancestrales costumbres de los pueblos españoles de “La España oculta “ de Cristina García Rodero, que bien podrían asemejarse a algún Bosco o Greco y ocupar el lugar del tenebrismo fotográfico, el juego de la luz en blanco y negro...


Como Dalí hay otros personajes que no distinguen entre el drama de la realidad y el humor, así después de estas reflexiones más bien críticas y técnicas pasamos al mundo político y al desarrollo de la paranoia. El Sr Acebes, ex-portavoz del Gobierno, dixit : “Miserable el Sr. Otegui”, por declarar desde el primer momento que no fue ETA la que atentó contra el pueblo de Madrid el 11M. “Miserable el PSOE”, por informar sobre algunas irregularidades en el desarrollo de la transmisión de información del PP al pueblo español sobre la autoría de los atentados...¿Y cuántos miserables más? Léase significado de miserable : Infeliz, desdichado. Abatido. Avariento, mezquino. Perverso, canalla.


Así, miserables abatidos son los más de 2.000 muertos de República Dominicana y las víctimas de Haití; miserables desdichados: los españoles financiando una boda en la que no nos toca ni un trozo de hojaldre con “delicias del mar”; miserables infelices los prisioneros torturados por las tropas inglesas y estadounidenses en Irak, miserables canallas: los que han solicitado humillación, tortura y muerte...esos sí son miserables.

Por si no queda claro hay que añadir según las otras acepciones quiénes son los miserables Sr. Acebes: miserables mezquinos son los que matan a civiles impunemente apoyando una guerra ilegal, miserables avarientos son los que ocultan información vital al pueblo con fines partidistas, miserables perversos: los que bombardean una boda asesinando inocentes, niños, novios, familiares...canallas miserables los que apoyan el comercio sexual infantil, avarientos miserables los que manejan una economía por encima de la sociedad, avarientos los que no administran medicinas porque no sale rentable, mezquinos miserables: los que juegan con la ilusión y la confianza del pueblo...esos, por si no se había dado usted cuenta...son realmente los verdaderos miserables, Sr. Acebes.

1 comentario:

Anónimo dijo...

buenisimo aritculo, me gustaria saber si tienes publicaciones en Mexico...saludos...Gabriela R. Sanchez..mi correo es carla_s74@yahoo.com.mx para que me escribas...bye